5.10.08

Renace el movimiento okupa en Madrid

pie de fotos "dos bicicríticos atienden la barra en el viejo Seco frente a uno de los murales"
"Debajo del asfalto está la huerta" se gritaba en el mayo francés. Hoy es el nombre de uno de los colectivos que dan vida al Centro Social Seco en el distrito de Retiro. Se dedica al cultivo y distribución de hortalizas ecológicas a pequeña escala. Un mágnífico local junto a la barrera urbana de la nefanda M30 cedido por el Ayuntamiento por un alquiler modesto da cobijo a un buen puñado de colectivos. Chavales del barrio navegan en ordenadores reciclados o cediddos, un grupo de coordinadores se reune para discutir distintos aspectos del funcionamiemento del centro, los de la Bici Crítica trabajan en su taller, atiborrados de cuadros, piezas, herramientas... todo ha sido sistematicamente clasificado y del taller han salido carritos con "sound sistem" "bicicletas jirafa" (tall bikes) y otros inventos que hacen las delicias de la Bici Crítica. Varias asociaciones de vecinos se alojan también es este centro colectivo. El viejo Seco nació hace muchos años en un colegio ocupado a punto de venirse abajo, en la calle Seco del barrio de las Californias. El curro de mucha gente hizo el milagro. El viejo Seco fue finalmente derribado y los viejos okupas se convirtieron en inquilinos.
Hace poco más de una año otro colegio fue ocupado en la calle del Acuerdo, en el barrio de Malasaña. Así nació el "Patio Maravillas". Allí se han reunido multitud de colectivos como la "Asamblea de Hombres contra la violencia de género" que prepara una manifestació para el próximo 30 de octubre. La Bici Crítica inauguró su segundo taller, que se reune todos los lunes y hace pocos meses hubo una campaña de autoinculpaciones por la okupación del edificio y se celebró una manifestación en la plaza de España para defender este nuevo espacio público.
Pero no acaba ahí lacosa, hace pocos meses una nueva okupación en la calle Atocha dió nacimiento al "Palacio Malaya": un magnífico centro social que cuenta con un café y un teatro, además de -no podía ser de otro modo- un tercer taller de la Bici Crítica. Hoy mismo la prensa recoge un simulacro de desalojo del palacio, mientras se celebraba una fiesta... aunque finalmente la fiesta continuaba y los policías municipales desistían de su intento.
Muchos jóvenes, desencantados de la política, se embarcan en estas aventuras colectivas para crear su propio espacio. Montan talleres de teatro, de música, de agricultura ecológica, de bicis, hacen fiestas, hay un bar con precios económicos. Cualquier iniciativa social, cultural... tiene cabida en los distintos espacios antes vacios.
Ahora que la crisis empieza a apretar, la okupación es de hecho una alternativa a la falta de espacios y dotaciones sociculturales en los barrios. El endeudamiento del Ayuntamiento ha relegado al baúl de los recuerdos hasta 40 equipamientos previstos, entre escuelas infantiles, centros de mayortes, equipamientos deportivos o culturales. El único centro deportivo co que contaban los 140.000 vecinos de Centro, junto al mercado de la Cebada, ha sido cerrado y veremos a ver cuando vuelve a abrir sus puertas. En Chamberí, el único parque para sus 250.000 vecinos -eñ Parque de Santander- ha sido privatizado para hacer un absurdo campo de tiro para practicar el golf y una pista circular que los vecinos llaman "tontódromo". La privatización de las insatalaciones deportivas del Canal de Isabel II ha hecho que los precios se disparen pasando de 30€ a 180€ por alquilar una cancha de baloncesto.En tiempos de crisis, frente a la privatización de los servicios públicos, las carencias de dotaciones sociales y el insultante abandono de inmuebles cerrados a cal y canto hasta que vengan mejores tiempos, la okupación puede ser una solución.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Infórmese mejor: el parque de Santander no ha sido provatizado por nadie, sigue en el mismo sitio donde estaba, cuidado por jardineros municipales, continúa siendo de libre acceso y no ha perdido ni un solo metro cuadrado para vonstruir ese "campo de tiro" del que usted habla. El campo de golf (que no de tiro) se encuentra sobre los aljibes del Canal de Isabel II, no en el parque de Santander. Y lo que usted llama "tontódromo" (no así los vecinos, al menos los que yo conozco, y vivo en Islas Filipinas, bien cerquita) está también construído sobre el mismo aljibe, no sobre el parque.

No entiendo por qué insulta usted de esa manera a los usuarios de la pista de jogging de esa manera. Probablemente, para usted lo inteligente sea salir a correr bien temprano por una acera de losas de cemento, como todos éstos años atrás hacíamos muchos vecinos, si bien es cierto que muchos se desanimaron cuando empezaron a ser intimidados por las mafias de "gorrillas" que operaban en las inmediaciones del aljibe extorsionando a los conductores que osaban aparcar, y contribuyendo al caos circulatorio y la contaminación ambiental y visual creando aparcamientos clandestinos en doble y triple fila. Curioso concepto de inteligencia, el suyo.

Los tontos que utilizamos su tontódromo disfrutamos de una pista construída en lo que parece un polímero de bajo impacto bastante menos perjudicial para rodillas y tobillos que la acera de cemento. Los tontos que utilizamos su tontódromo tenemos una pista limpia y moderna donde correr entre árboles y setos, sin tener que tragarnos los humos de los coches y las agresiones de los "gorrillas". Los tontos que utilizamos su tontódromo debemos ser tontos de remate porque después de hacer el tonto en su tontódromo haciendo deporte, sea corriendo o caminando, vamos a pasear al parque de Santander que sigue estando donde estaba, y con la misma extensión que tenía. Y somos tan sumamente tontos, que para ir de su tontódromo al parque de Santander, lo hacemos caminando por la acera, que ahora por fin es una acera y no una pista de atletismo encubierta, y sin ser intimidados y hasta agredidos por la mafia de los gorrillas que por fin ha desaparecido, así como los aparcamientos clandestinos y la doble fila, al instalar parquímetros en toda la acera.

Un poco de seriedad, por favor, en vez de pontificar tanto e insultar a los vecinos que disfrutamos de la pista y el parque, dese una vuelta por su odiado tontódromo (aunque sea caminando) y por el parque de Santander, y si, además de imaginación desatada e insulto fácil, tiene ojos en la cara, igual ve las cosas de otra manera: como son en realidad.

¿Publicará éste comentario y se dignará a comprobar personalmente (y no de oìdas) cuanto digo?
Y si lo hace ¿Se retratará en su blog de las falacias que ha escrito en éste artículo sobre el parque de Santander y los tontos que utilizamos la pista de bajo impacto?


Un vecino indignado.

Ramón Linaza dijo...

Estimado vecino indignado:
me alegro mucho de que practique usted el sano deporte del atletismo en la pista que existe en las instalaciones deportivas del III Depósito del Canal de Isabel II, sin ser molestado por inmigrantes que se ganan la vida como pueden y bajo la vigilancia de agentes privados de seguridad. Mi experiencia es distinta, hace 30 años q vivo en el barrio y ya no puedo pasear con mi perro como hacía antes en la zona del antiguo Parque de Santander, salvo naturalemnte que lo lleve atado y me conforme con dar vueltas al campo de golf. Tampoco puedo pasear por el antigüo parque porque ya no exise, ahora lo que hay es un jardín urbano que adorna instalaciones privadas en un espacio público.Pertenezco a la Asociación Parque sí en Chamberí, y nuestro propósito es que este espacio sea devuelto a todos los vecinos, incluyendo jóvenes ancianos y niños aunque no practiquen el atletismo ni el golf, que se desmonten las horribles torretas del campo de prácticas de tiro de golf con su horrorosa hierba artificial, que se deje de contaminar lumínicamente el barrio por la noche. Estoy informado del proyecto de Parque Público que prometió el sr. Gallardón, en un distrito que con 250.000 habitantes no tiene ningún parque público y me parece penoso e indignante que doña Esperanza haya hecho unas instalaciones deportivas privadas y para pijos y nuevos ricos. Pero claro, seguramente, al igual que los militantes del PP que acudieron a la inauguración de este bodrio, los vecinos que pensamos de otro modo somos "muertos de hambre" y "rojos de mierda" que deberíamos estar en la cárcel o enterrados en fosas comunes. Por fortuna vivimos en democracia y estoy seguro de que en 2011 veremos un cambio político en la Comunidad de Madrid, tan necesario como urgente. Entre tanto reciba usted mi más sincero respeto hacia sus opiniones, algunas de las cuales no comparto, no por falta de información, sino tal vez por tener demasiada información.