Señala Jesús Rodriguez Molina en un artículo publicado por ATTAC Madrid que la deuda del Ayuntamiento de Madrid "sería superior a los 9.295 millones de euros y si lo ponemos en relación con el presupuesto de ingresos aprobado por el Ayuntamiento para 2011 que sólo es de 4.000 millones resultaría que el porcentaje superaría el 232,38%, la Ley de Haciendas Locales limita ese indicador por debajo del 110%, es decir más que duplica lo limitado por Ley, eso si que es excelencia en la gestión y en el cumplimiento de la Ley."
De aquellas lluvias...estos lodos. Conviene recordar la lucha de los vecinos y de organizaciones como Ecologistas en Acción contra la disparatada ampliación de la M30, en la que el alcaldé enterró 6.000 millones de euros apostando por un modelo de movilidad propio del siglo pasado, basado en un alto consumo de petróleo y faraónicas infraestructuras.
Ramón Linaza, "el otro faraón" durante las protestas organizadas por la "Plataforma M30 No más coches"
Ciertamente era necesario reformar la M30, que se habí convertido en una cicratiz en el tejido urbano, obsoleta, sucia y ruidosa. Pero era necesario hacerlo en el sentido contrario al que lo hizo el Alcalde. Era necesario apostar por el siglo XXI y la reducción del uso del coche en la ciudad. Era posible convertir la Avenida del Manzanares y la Avenida la Paz, en un gran bulevar circular, a semejanza de la Avenida de la Ilustración. Haberlo dato de un tranvía circular que aliviara la sobrecargada linea 6 del metro, de un carril bici, de espacios peatonales y árboles junto a las riveras del Manzanares y del antigüo arrollo del Abronigal.
Ramón Linaza, Inés Sabanés, Roberto Tornamina, Carlos Carnero...en el acto convocado por la Asociación de Vecinos Afectados del Nudo Sur contra el ByPass Sur de la M30
Nada de eso estaba en los proyectos del faraón. Él quiso pasar a la historia como el gran reformador de la ciudad, a costa de los derechos de los ciudadanos, del cumplimiento de la ley y de la hipoteca del futuro de la ciudad: El proyecto de ampliación de la M30 se troceó como un chorizo en más de veinte proyectos a fin de sortear la obligatoria declaración de impacto ambiental. Decenas de miles de árboles fueron talados... aún recuerdo aquella tarde noche de agosto en que aferrados a las acacias del Paseo de la Virgen del Puerto, tratábamos de impedirlo.
También el patrimonio histórico la ciudad sufrió los delirios faraónicos de Gallardón. La Puerta del Rey que da acceso a la Casa de Campo y que conservó a lo largo de toda la dictadura un escudo republicano, fue desmontada y escondida vaya usted a saber donde, para ser sustituida por unas columnas de cierto aire imperial. El pasadizo que comunicaba el Campo del Moro con la Casa de Campo, construido en el re¡nado de José Bonaparte, perdió una sus entradas, sepultado por la mega autopista urbana.
Alberto Ruiz Gallardón y Ramón Linaza durante la inauguración del soterramiesnto de la M30
Conviene recordar estas cosas ahora que se acercan las elecciones y el alcalde se prepara para nuevas inauguraciones. Por que las elecciones son ante todo un ejercicio de rendición de cuantas de los gobernantes ante los ciudadanos. Y el alcalde tiene muchas cuentas pendientes.
Ramón Linaza, "el otro faraón" durante las protestas organizadas por la "Plataforma M30 No más coches"
Ciertamente era necesario reformar la M30, que se habí convertido en una cicratiz en el tejido urbano, obsoleta, sucia y ruidosa. Pero era necesario hacerlo en el sentido contrario al que lo hizo el Alcalde. Era necesario apostar por el siglo XXI y la reducción del uso del coche en la ciudad. Era posible convertir la Avenida del Manzanares y la Avenida la Paz, en un gran bulevar circular, a semejanza de la Avenida de la Ilustración. Haberlo dato de un tranvía circular que aliviara la sobrecargada linea 6 del metro, de un carril bici, de espacios peatonales y árboles junto a las riveras del Manzanares y del antigüo arrollo del Abronigal.
Ramón Linaza, Inés Sabanés, Roberto Tornamina, Carlos Carnero...en el acto convocado por la Asociación de Vecinos Afectados del Nudo Sur contra el ByPass Sur de la M30
Nada de eso estaba en los proyectos del faraón. Él quiso pasar a la historia como el gran reformador de la ciudad, a costa de los derechos de los ciudadanos, del cumplimiento de la ley y de la hipoteca del futuro de la ciudad: El proyecto de ampliación de la M30 se troceó como un chorizo en más de veinte proyectos a fin de sortear la obligatoria declaración de impacto ambiental. Decenas de miles de árboles fueron talados... aún recuerdo aquella tarde noche de agosto en que aferrados a las acacias del Paseo de la Virgen del Puerto, tratábamos de impedirlo.
También el patrimonio histórico la ciudad sufrió los delirios faraónicos de Gallardón. La Puerta del Rey que da acceso a la Casa de Campo y que conservó a lo largo de toda la dictadura un escudo republicano, fue desmontada y escondida vaya usted a saber donde, para ser sustituida por unas columnas de cierto aire imperial. El pasadizo que comunicaba el Campo del Moro con la Casa de Campo, construido en el re¡nado de José Bonaparte, perdió una sus entradas, sepultado por la mega autopista urbana.
Alberto Ruiz Gallardón y Ramón Linaza durante la inauguración del soterramiesnto de la M30
Conviene recordar estas cosas ahora que se acercan las elecciones y el alcalde se prepara para nuevas inauguraciones. Por que las elecciones son ante todo un ejercicio de rendición de cuantas de los gobernantes ante los ciudadanos. Y el alcalde tiene muchas cuentas pendientes.
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